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Abusos, robo de menores y trata de personas: siete detenidos y 69 víctimas rescatadas de un “templo” en La Matanza

Una banda de falsos pastores evangélicos forzaba a sus seguidores a desprenderse de “lo más preciado”. Hubo operativos en Buenos Aires, Salta, Tucumán, Mendoza, Neuquén y Entre Ríos.

El templo "Filadelfia", por dentro. Hay siete detenidos.
Actualizada: 02/12/2020 22:33
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La “Tía Eva” dirigía todo: el templo, la voluntad de sus fieles y una red de delitos contra la integridad sexual, la identidad y, obviamente, la propiedad. La comunidad religiosa autodenominada “Filadelfia” operaba en Buenos Aires y otras varias provincias, e incluso en países limítrofes.

Este miércoles, tras un megaoperativo donde participaron 250 agentes de la Policía Federal Argentina y la Gendarmería Nacional, detuvieron a siete integrantes de la organización criminal y rescataron a 69 víctimas.

El templo “Filadelfia” se dedicaba a la trata de personas, lavado de dinero, delitos contra la integridad sexual de menores y adultos, contra la identidad y contra la vida. En total, se hicieron 23 allanamientos en las provincias de Buenos Aires, Salta, Tucumán, Mendoza, Neuquén y Entre Ríos.

Según los investigadores, las y los miembros de la “comunidad” sustraían menores a sus padres biológicos para inscribirlos luego como hijos de varias mujeres de la organización. Además, se pudo establecer que los detenidos cometieron instigación al suicidio en perjuicio de un joven que se había reconocido como homosexual, hecho por el que sufrió permanentes hostigamientos y agresiones.

Siempre bajo “la palabra divina”, el joven había sido obligado a desnudarse públicamente, fue golpeado y sufrió agresiones (como baldazos de agua fría), entre otras atrocidades. Finalmente el joven se quitó la vida.

A raíz de un operativo realizado en 2019 por la Policía de la Provincia de Buenos Aires, se inició una investigación que, en aquel momento, concluyó con varios allanamientos por los delitos de trata de personas y lavado de dinero. En ese entonces, se comprobó que la organización criminal operaba con un minucioso sistema de captación de personas para, posteriormente, explotarlas laboralmente y someterlas a la servidumbre.

En aquel procedimiento fue detenida la “Tía Eva”, una de las líderes de la organización, que forzaba a sus fieles a desprenderse de “lo más preciado”. Hubo 26 detenidos. Y según pudo averiguar TN.com.ar, se incautaron casi 40 mil dólares, más de un millón de pesos y 17 vehículos.

El personal de GNA y de PFA, junto con el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Número 3 de Morón, a cargo del Dr. Juan Pablo Barral, secretaría Número 9 de la Dra. Mariana Sioli, continuó con la pesquisa a partir de reiteradas denuncias que realizaron las víctimas.

“Evitar el pecado”, la excusa para las atrocidades

El grupo, oculto bajo una presunta vocación religiosa, comenzó sus actividades en el país entre 1972 y 1973 y estaba liderado por “Tía Eva” y dos cómplices a quienes se las acusa, hasta ahora, de dos abusos sexuales (en el marco de acciones “religiosas” con el objetivo de “evitar el pecado”) contra, por lo menos, un menor. Dado su forma de actuar y el modus operandi, este tipo de hechos se fueron reiterando a lo largo de los años.

Con un “templo” principal emplazado en el Gran Buenos Aires y “anexos” en varias provincias y -según se presume e investiga- en Brasil y Paraguay, captaban personas en distintas partes del país. Centralmente, esas captaciones eran realizadas sobre niñas y niños en situaciones de pobreza y vulnerabilidad. Bajo mecanismos de persuasión y coerción les hacían creer que la líder de la organización era una persona con un poder supraterrenal.

Una vez cooptadas, las víctimas eran obligadas a vivir en condiciones deplorables, carentes de higiene y con una alimentación degradante. No se podían comunicar con sus familias, no se les permitía ir a la escuela y quedaban, además, sin su documentación personal. También eran obligados a trabajar en una panificadora que poseía la organización.

En conferencia de prensa, la ministra de Seguridad de la Nación Sabina Frederic destacó “el trabajo profesional, pormenorizado y sigiloso que realizaron las fuerzas” en auxilio de la Justicia. En ese sentido, remarcó que el operativo “no despertó las sospechas de nadie, por lo que se consiguió ingresar a los lugares y desbaratar la organización”.

El secretario de Seguridad y Política Criminal, Eduardo Villalba, agregó: “Estamos muy satisfechos y vamos a redoblar los esfuerzos en este tipo de investigaciones para desbaratar el delito complejo”.

Junto a Frederic y Villalba estuvo el subsecretario de Intervención Federal, Luis Morales. Además, en representación de la PFA asistieron el jefe y el subjefe de la fuerza, Juan Carlos Hernández y Osvaldo Mato; y las máximas autoridades de la Superintendencia Federal de Intervención Territorial, Pablo Daniel Moreno, de la Superintendencia de Investigaciones Federales, Gustavo Acero, y del Departamento Unidad de Investigación de Trata de Personas, Dardo Castro.

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